viernes, 9 de agosto de 2013

Dia 8 - A Fonsagrada - Cadavo Baleira. 26 kilómetros con cuatro puertos y la cuesta mas dura del Camino.

Etapa dura, muy dura. Una auténtica rompepiernas con continuas subidas y bajadas de nivel medio y una subida de más de un kilómetro que es la mas dura de todo el Camino Primitivo. Pero también una etapa muy bonita e interesante que nos deja ya tan solo a 30 kilómetros de Lugo, donde llegaré mañana si Dios quiere.
Como la etapa se prevé larga, me despierto a las seis y media y a las siete y cuarto bajo al bar a desayunar. Ya están allí varios peregrinos que conozco, entre ellos la pareja de las vendas por todo en cuerpo de ayer,
que también han dormido en la pensión. Me dice el chico que está mejor y mas animado.
A mi lado se sienta otro al que veo todos los días. Charlamos un poco y le cuento que cuando termine me voy a Bueu a descansar. Me dice que él también, porque resulta que es de Pontevedta y vive al lado de Bueu, en Area de Bon, una playa a la que nosotros vamos a veces. También me cuenta que conoce bien el mercado de Bueu porque él es el encargado de los mercados de Pontevedra y conoce allí a todo el mundo. Me dice que vaya a conocer el mercado de Pontevedra, que por lo visto es un edificio precioso.  Charlamos de Bueu mientras desayunamos y luego el se queda y yo me pongo en marcha a las ocho menos veinte. Que casualidad encontrar a uno de Bueu aquí.
La salida de Fonsagrada se hace callejeando por delante de la iglesia hasta alcanzar la carretera. La vista a la salida es de cine. En A Fonsagrada, que está en alto, el cielo está completamente despejado. Pero los valles de abajo estan completamente cubiertos de nubes bajas que dejan ver las cimas de las colinas cercanas. Es como un mar blanco del que sobresalen islotes. Precioso.
Cruzo la carretera y seguimos por ella hasta el cercano pueblo de Padrón, a kilómetro y medio de Fonsagrada y que es donde está el albergue de la ciudad, un poco lejos para que sea cómodo.
Padrón es apenas un grupo de casas con una bonita iglesia. Lo cruzamos enseguida y tomamos un camino estrecho que va pegado a la carretera. Adelanto a dos parejas, una de las cuales es la de la chica albina que vi ayer. El Camino por ahora es en suave descenso y cómodo, pero eso va a durar poco.
Pasamos por delante del cementerio de Padrón y nos internamos en un sendero recto por en medio de un bosque. Por allí veo venir en dirección contraria a un chico con el pelo rapado al que no he visto todavía. Le pregunto si va de vuelta y me dice que no, que ha llegado a una carretera en la que no había ninguna señal y que pensaba que se había equivocado. Seguimos juntos hasta la carretera y, en efecto, no hay ninguna señal, pero el sentido común y la dirección general de la marcha dicen que subamos hacia la izquierda. Y acertamos, unos cien metros mas adelante una flecha indica que crucemos la carretera y al otro lado un mojón nos dice que comencemos a subir por por un sendero en el bosque que es bastante empinado al principio, aunque se suaviza rápidamente.
El rapado va mas rápido y se aleja pronto, por lo que vuelvo a ir solo por el sendero, que va ascendiendo hacia un parque eólico que tenemos enfrente y con preciosas vistas a la izquierda de los valles aún cubiertos de niebla.
Pasamos cerca y por encima de dos caseríos. La senda sigue subiendo de manera continua hacia los molinos de viento hasta llegar al pequeño pueblo de Montouto, que da nombre al alto que estamos subiendo.
Nada mas dejar el pueblo el Camino se empina y atacamos la última parte del ascenso que nos lleva hasta el Alto de Montouto. Estamos a 1.025  metros de altura y con muy buenas vistas de los dos valles que domina el alto. Se ve perfectamente como los montes van perdiendo altura y suavizándose a medida que vamos acercándonos a Lugo y alejándonos de las cordilleras asturianas. Ya llevamos ocho kilómetros y medio y hemos coronado el puerto mas alto del día, que no será el único. Vamos a subir cuatro.
En el alto hay una capilla del siglo XVII y las ruinas de lo que en su dia fue el Real Hospital de Montouto. El hospital fue fundado por Pedro I el Cruel en el siglo XIV, y debió ser muy grande, pues tenía hasta murallas. También hay un dolmen de origen Celta, todo lo cual da idea de la importancia que tuvo este lugar, ahora dominado por los molinos de viento que se extienden por toda la cordillera.
Tras visitar la cima, comienzo a bajar por una excelente pista, inclinada al principio, pero que luego se suaviza. Pronto entramos en un bosque de pinos que, en descenso permanente nos lleva hacia el valle.
El final del sendero es bastante mas empinado y estrecho, y hay que bajarlo con cuidado hasta llegar al pueblo con el bonito nombre de Paradavella, ya en el kilómetro doce de etapa.
Justo a la entrada del pueblo, donde termina el sendero, hay un bar bien puesto y con mesas de madera en el exterior donde páramos todos los que vamos llegando. Llega la pareja que ayer me preguntó donde dormía para coger la misma pensión, una pareja que el chico es español y la chica una guiri que no para de hablar y que es una pesadilla cuando te adelantan, pues vas oyéndola desde quinientos metros antes hasta quinientos después y también el de Bueu, justo cuando ya estoy recogiendo para marcharme.
Cruzamos Paradavella por la carretera y nada mas salir se plantea un dilema. El Camino se desvía a la derecha para subir un monte. Mi guía aconseja vivamente, apoyada en las recomendaciones del cura de Fonsagrada, al que citan como autoridad del Camino, que sigamos los cuatro próximos kilómetros por la carretera. Dicen que el tramo por el monte es horrible, una sucesión interminable de subidas y bajadas y para rematar el kilómetro mas duro de todo el Camino.
¿El kilómetro mas duro?. ¡Yo no me lo pierdo!. Entre mi aversión a ir por el arcén de la carretera y la posibilidad de hacer el kilómetro mas duro para luego contarlo, la cuestión no tiene duda. A pesar de las santas adverterncias del señor cura, enfilo el Camino y empiezo a subir el sendero que se aleja de la carretera.
La primera parte dura dos kilómetros. Es dura pero no más que otros cien tramos que ya hemos subido. Y es precioso. Un estrecho sendero por la ladera arbolada, que a menudo tiene tramos embarrados por los arroyos que bajan del monte. Alterna tramos de ascenso con tramos llanos y no se hace tan pesada como temía. Finalmente vuelve a la carretera para cruzarla de inmediato y comenzar a bajar hasta el fondo del valle y llegar al pueblo de A Degollada, que está a la misma altura que Paradavella. O sea, que vamos ahora a tener que subir otra vez ahora todo lo que habíamos ganado.
A la salida de A Degollada (dos casas y una palloza) hay un pequeño tramo asfaltado en el que veo que caen ramas secas de la ladera del monte. Algunas están en medio del camino por el que vamos. Al llegar a su altura el paisano que las está tirando me dice que si le hago el favor de apartar del Camino las ramas que han caído en él. Son un par de ellas y no me cuesta nada.
Pasado el caserío el Camino vuelve al monte y empieza a subir. Tenemos dos kilómetros y medio de subida hasta A Lastra. La subida al inicio es mas dura que la anterior, pero soportable. Hay tramos espectaculares. Cruzamos varios arroyos y en dos ocasiones tengo que sortear árboles que han caido sobre el Camino. Uno de ellos ha caído de largo, con lo que la copa tapa completamente la senda. Para pasar hay que ir saltando sobre unas ramas y apartando otras hasta conseguir cruzarlo.
Llegamos a otro pequeño caserío y a partir de allí empieza el famoso último kilómetro. La verdad es que es brutal. Una subida constante y muy empinada que obliga a descansar cada pocos pasos. Mucha piedra suelta que hace mas difícil la subida y un sendero muy estrecho que hace imposible subir en zig-zag. O sea, una pesadilla.
Tras mucho rato y esfuerzo llego a la última rampa que desemboca ya en la carretera. Es la peor. Una pendiente fortísima, pero gracias a Dios corta, que nos deja en la carretera justo en la cima de este segundo alto del dia, a la entrada del pueblo de A Lastra.
La guía tenía razón, la subida hubiese sido mas cómoda por la carretera, pero yo no me la hubiese perdido por nada del mundo. Ha sido un tramo de los mas especiales y bonitos de todo el Camino.
Descanso un poco y sigo. Este sería un lugar ideal para poner un bar, pero desgraciadamente nadie ha tenido la idea todavía. Así que cruzo el pequeño pueblo en bajada y sigo. Llevamos ya veinte kilómetros en el cuerpo.
La bajada dura poco. De inmediato el Camino se desvía a la izquierda para atacar el tercer alto del día, el puerto de Fontaneira. Son otros dos kilómetros de ascenso por pista forestal que se me hacen durísimos. La pendiente es fuerte, pero no mas que otras que ya hemos pasado. Es esta continua sucesión de subidas y bajadas sin tramos rectos la que agota las fuerzas. Además ahora el sol pega muy fuerte y aquí ya no hay muchos árboles que nos protejan.
A  media subida me paro y me siento a comer chorizo, nueces y una naranja. Con esto ya tengo combustible para alcanzar el Alto, de nuevo justo al llegar a la carretera.
Bajamos ahora un poco por la carretera hasta el pueblo de Fontaneira. Allí hay un bar, pero decido no parar porque acabo de comer y lo que quiero es hacer cuanto antes lo que queda y llegar al hotel.
Un tramo por un sendero entre árboles y salimos de nuevo a la carretera para afrontar el cuarto y último alto, el de Carballín. Este es sencillo, se hace íntegramente por carretera y no dura más de un kilómetro. Lo único malo es el sol, que ahora pega fuerte.
Desde aquí se retoma un sendero que al principio entre pinos y luego ya por terreno despejado nos acerca a Cadavo Baleira con alguna pequeña subidilla que a estas alturas ya ni se nota.
Cadavo aparece de repente en el fondo del valle cuando ya estás casi encima. Es un pueblo desconcertante. Todas las construcciones son nuevas y tiene calles anchas y cuidadas. Está bastante desparramado y apenas tiene tiendas, lo que es muy curioso. Se entra justo por donde está el albergue, donde sello y muy cerca ya se encuentra el hotel Moneda, al que llego un poco pasadas las dos.
Subo derecho a la habitación tras comprar agua y coca cola y me voy directo a la ducha.
Estoy bastante cansado. La etapa ha sido muy dura, pero ahora ya se ha acabado y con la ducha y un poco de descanso me recupero enseguida.
A las cuatro salgo a dar una vuelta por el pueblo. Mi primera impresión es correcta. No tiene nada que ver. Así que me siento en el bar del hotel a tomar una coca y a escribir. 
Después subo a la habitación y a las ocho y media bajo a cenar al bar del hotel.Cuando entro está solo una pareja que he visto por el Camino. No han empezado todavía y me invitan a sentarme con ellos. Acepto encantado. Al cabo de un poco llega una chica que viene del albergue y también se sienta con nosotros. 
Es una cena divertida, hablando todo el rato del Camino. El chico es Argentino ( están por todas partes), su compañera es de Bilbao, pero vive en Madrid y la otra chica es valenciana. La pareja empezó en Salas y va a llegar hasta Santiago. La valenciana acaba mañana en Lugo. Hablamos de cuestas, de ampollas, de libros y cine del Camino, de albergues...
El argentino cuenta que ayer tuvieron que abrir el edificio de protección civil de Fonsagrada  porque el albergue se llenó.Durmieron en el suelo tan ricamente. En vista de eso hoy han decidido dormir en hotel. Benditos hoteles.
Yo ceno sopa y un filete muy bueno.Menú del Peregrino: 9,5 euros. Me lo paso bien en la cena. Está bien por un día no cenar solo.
Terminada la cena me subo a la habitación a ver la tele y terminar la crónica. Veo "Banderas de nuestros padres", que trata de unos soldados americanos que tienen que subir un monte. Me siento muy identificado con ellos.
Ha sido un buen dia. Largo y cansado, con un camino difícil, duro y muy gratificante. Pero ahora me encuentro descansado y con las piernas bien. Y la cena en compañía ha sido muy agradable para rematar.
Me he alegrado mucho de tomar en Paradavella el camino difícil a A Lastra. Y esta es la enseñanza del camino que dedico a Paloma. Entre un Camino fácil y anodino y uno difícil, pero retador y bello, hay que elegir el difícil. Será mas gratificante, disfrutaras mas del camino y no te quedarás con la sensación de no haberlo intentado.
Mañana llegamos ya a Lugo. Es una etapa muy larga, pero parece que no tan difícil como las de hoy. A ver que tal se da.
Trivial del Camino
Hoy las preguntas han sido fáciles, porque las ha acertado todo el mundo.
El autodenominado último templario del Camino es Tomas. Vive en Manjarín, primer pueblo tras pasar el monte Teleno y la Cruz de Hierro y tiene un peculiar refugio, muy popular en el Camino.
Carmina ha contestado con el nombre del último templario real, por lo que también vale.
En cuanto al peso de la mochila, también acierto pleno. Se recomienda un 10% del peso corporal, pero la realidad es que no creo que nadie lo cumpla. Yo que peso algo mas de ochenta kilos debería llevar por esa regla ocho kilos. Mi mochila pesa 13 y voy cómodo. Y por el tamaño de mochilas que se ven, lo mas normal que lleva la gente es entre 10 y 15 kilos. Así que Ricardo, ya sabes. Nada de chirigotas en el Camino y mochila lo mas ligera posible.
Para hoy las preguntas son estas.
Hay dos libros medievales que relatan profusión de milagros de Santiago y otros santos en favor de los peregrinos.
Uno es muy célebre y data de 1.140. Está en la catedral de Santiago.
El otro fue escrito por un rey castellano y narra milagros de la Virgen.
- ¿Como se llaman los dos libros?
- ¿En que iglesia del Camino tienen lugar los milagros de la virgen que narra el segundo de ellos?.
A ver que tal se os da.



Saliendo de Fonsagrada
Padron
Saliendo de Padron
Montouto y los molinos
Subiendo a Montouto
Subiendo a Montouto
Alto de Montouto
Alto de Montouto
Camino  a Paradavella
Paradavella desde la subida a A lastra
Camino a A lastra. 
Arbol caido.
Subiendo a A Lastra
Subiendo A Fontaneira
Alto de Carballin
Camino hacia Cadavo
Cadavo Baleira
Habitacion del hotel

4 comentarios:

  1. A la Sra. Rodríguez que tenga en cuenta el comentario que le hace el peregrino que es mejor elegir el camino difícil porque luego tiene su recompensa, que es encontrarte con Argentinos!!!! Has visto que estamos en todos lados!!!!!
    Y como el peregrino empezó con refranes aquí hago mi aporte también, que vienen para esta ocasión:
    No siempre es mejor camino el más corto y En largos caminos se hacen amigos

    El concurso se está poniendo difícil porque todos quieren ser invitados por la tía Carmina, pero hay que dar puntos extras a los que se encuentran concursando desde el principio!!!!

    A ver si hoy acierto :
    Libre Sancti Iacobi
    El rey Alfonso X el sabio escribió LAS CANTIGAS DE SANTA MARÍA DEL REY ALFONSO X EL SABIO.
    Es un conjunto de canciones que relatan la vida y milagros de la virgen, escritas en gallego antiguo. Los milagros ocurren en Villalcazar de Sirga

    Ánimo Antonio que en breve los caminos serán menos duros y seguramente la Sra Rodríguez te recompensara con creces todo el esfuerzo realizado!!!!

    Besos

    ResponderEliminar
  2. Inocente de mí me decía cuando leía hace unos minutos de madrugada la crónica del peregrino, que hoy igual Cristina se había echado a dormir o a otra distracción (por lo del fin de semana). ¡Pero observad la hora en que publica! Llamo la atención de Antonio y Mrs Rodríguez sobre esta mujer, que sospecho desatiende sus deberes caseros, conyugales, en la embajada y más, por publicar a esas horas.

    En fin, tras rajar de Cristina, digo que yo también he pensado casualmente en esas respuestas. ¿Me llevo algo?

    Por cierto, equivoqueme ayer pensando que al Peregrino se le acababan las etapas rompepiernas. Y va y le toca una de cuatro puertos. Y si no los hay se los busca. ¿Habrá el próximo año un Camino en los Dolomitas para que no se aburra? ¿Qué pensará Concha de todo esto? Estará fascinada por este megamontañero.

    En fin, que debéis las guasaperas ayudar a Mari a publicar, que ella insiste en que manda sus aportaciones y no me extrañaría que le hayáis explicado algo mal para que no puntúe (¡ojito, De Simone y Rodríguez, que no todo lo que hacéis en el guasa es bueno!)

    Me voy a desayunar, que ya son horas.

    Buen día a todos, especialmente a Antonio el de las botas de siete leguas.

    Porre el lento en publicar (¡ya te vale!)

    ResponderEliminar
  3. Como habreis observado el peregrino ya ha encontrado compañia , en la cena estaban el argentino y la de bilbao y luego el peregrino y la de valencia, esto no puede ser hasta en los lugares más recónditos mi maridito que es tan simpático y dicharachero hace amistades, Cristina no me quiere decir el nombre de la valenciana , dice que no lo sabe pero no me lo creo es para que no nos cachondeemos como con Barbara.
    Por cierto peregrino ese contacto que has hecho de Bueu es muy bueno , podrías hacer más amistad y que nos proporcione contactos para alquilar en Bueu , bueno bonito y barato, que no se te escape sin que te enteres de más datos de el y que nos ayude a encontrar casa para el año que viene.
    Por otro lado ya tenemos la ubicación de nuestro retiro cuando nos jubilemos , el bar en el alto de A Lastra, ¿has guardado las coordenadas en el gps para que no se nos olvide?
    Besos a todos y por ciertos estos argentinos están en todos lados , no hay quien se libre de ellos.

    ResponderEliminar
  4. Estoy desesperada, no se que hago, pero no publico ningun comentario.
    A ver si hoy hay suerte!
    Un abrazo Antonio. Me tienes pasmada con este Camino tan duro
    Nurse Mery

    ResponderEliminar